El cerebro es el órgano más sensible del "órgano sexual". El deseo sexual comienza en el cerebro y trabaja su camino hacia abajo. Los productos químicos en el cerebro llamadas neurotransmisores ayudar a las células del cerebro comunicarse entre sí con el fin de estimular el flujo sanguíneo a los órganos sexuales. En una persona con depresión, estos productos químicos están fuera de equilibrio. Como resultado de ello, el deseo sexual es bajo o inexistente. Además, los bajos niveles de algunos de estos productos químicos pueden aburrida agradable sentimientos. La cepa que la depresión lugares en las relaciones puede interferir además con la función sexual y el placer.
Se estima que el 35 por ciento a 47 por ciento de las personas con depresión sufren algunos problemas sexuales. La gravedad del problema depende de la gravedad de la depresión y la presencia de ansiedad. Para aquellos con depresión más grave, el 61 por ciento tienen problemas sexuales.
lunes, 13 de octubre de 2008
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